A comienzos de la década del 2000 ya se mencionaba que una de las cuestiones que aquejaba la Bioética era la falta de asombro. Enla actualidad vemos que el paciente, el débil y el indefenso han pasado a ser clientes u objetos puestos a disposición de caprichospersonales, comunitarios o empresariales basados en la funcionalidad o utilidad que pueda tener una vida en particular. Es por esoque en este trabajo proponemos el asombro como una actitud que permite no solo situar a la persona humana como centro y puntode partida de la reflexión bioética, sino que en dicho centro esté de manera preponderante el que más sufre, el débil y el indefenso.PALAbRAS CLAve: bioética, defensa del paciente, relaciones médico-paciente, ética médica.
At the beginning of the 2000s, it was already mentioned that one of the problems of bioethics is the lack of wonder. Today we see that the patient, the weak and the defenceless have become clients or objects, placed at the disposal of personal, communal or corporate whims based on the functionality or usefulness that a particular life may have. Therefore, in this paper we propose wonder as an attitude that allows not only to place the human person as the center and starting point of bioethical reflection, but also to place in such center the one who suffers the most, the weak and the defenseless.KEYWORDS: bioethics, patient advocacy, doctor-patient relationship, medical ethics.